10 de marzo de 2012

Llaman a la puerta

Con los maestros acordes de Freddy Mercury avasallando a mi cabeza y sometiendo a mis pulsaciones, escribo esta carta que tal vez sea la última, tal vez no.
Ya sólo vengo aquí para escuchar buena música y escribir unos versos. Todo lo que escribo lo dejo en este rincón, porque sé que algún día volverás. Sé que no es para siempre tu abandono. Sé que dije cosas horribles. Pero tú sabes que es todo mentira. Sabes que sólo saldré de este infierno si me ayudas. Sabes que te quiero con toda la fuerza de mi corazón.
Por ti brillan mis ojos, por ti late mi corazón, por ti las palabras acuden a mi mente y me permiten escribir estos textos que tanto te gustan. Porque estoy enamorado de ti desde el primer día que te vi y no he dejado de quererte ni de necesitarte ni un solo segundo desde entonces.
Acudo de nuevo a este rincón de mi mente a ver si te encuentro, encontrándome con que sigue vacío pero lleno de telas de araña y recuerdos del pasado que no consiguen saciarme de ti.
Llaman a la puerta y sé que eres tú… bajo corriendo a abrirte y ya no estás. Sólo hay un sobre sellado con un beso y dentro una cuartilla con un “TE AMO” y un corazón.

3 de Septiembre de 2009.